Lasagna de pollo

180 gramos margarina
3 pechugas grandes pollo
2 cebollas picada fina
2 cucharadas consomé pollo
2 tazas agua
5 cucharadas harina
2 cajas crema dulce
3 tazas caldo pollo
1 taza leche
2 latas hongos pequeños con su jugo
400 gramos (12 hojas) pasta lasagna (ojalá italiana)
460 gramos queso mozarella rallado
60 gramos queso parmesano rallado
1 cucharadita sal
1/4 cucharadita pimienta
1/2 taza vino blanco seco
Derretir 60 gramos margarina y dorar las pechugas condimentadas con pimienta, mostaza, ajos y sal. Agregar cebolla, consomé pollo y 3 tazas de agua. Tapar la olla de presión y dejar 15 minutos suavizando. Enfriar, deshuesar y picar la carne fina sin la piel y colar caldo.

Salsa

Aparte derretir en una olla 115 gramos margarina, freír una cebolla y dejar cristalizar, luego agregar la harina y mezclar bien antes de agregar la leche, crema dulce, caldo de pollo, hongos con su jugo, vino, sal y pimienta. Dejar hervir sin dejar de revolver. Apartar. Reservar una taza de salsa y agregar la carne de pollo a la salsa restante. Apartar del calor. En suficiente agua hirviendo con sal poner la lasagna poco a poco hasta que flote, luego comprobar si está tierna pero firme. Secar sobre limpiones extendidos para luego armar la lasagna.
En un pirex rectangular extra grande poner una capa de salsa de pollo, capa de pasta, capa de salsa de pollo, capa de queso mozarella, capa de pasta, capa de salsa de pollo, capa de queso mozarella, capa de pasta, capa de la salsa reservada (sin pollo).
Rociar de queso parmesano.
Poner en horno precalentado a 350 ° F durante 25 minutos solo a calentar.

NOTA: las pastas pueden congelarse, pero se deben descongelar muy bien y estar a temperatura ambiente para luego poner al horno a calentar.

15 porciones