1 kilo hígado pollo (o 3/4 kilo ternera o cerdo)
1/4 kilo jamos en trozos o tajadeado
1/4 kilo tocineta
3 huevos
1/2 taza queso parmesano
6 hojas laurel
1 cucharadita pimienta
1 cucharada condimento completo
1/4 cucharadita canela
1/4 cucharadita clavo olor en polvo
60 gramos mantequilla (cobertura)
1/2 taza brandy o whisky
SALSA BLANCA
2 tazas leche
4 cucharadas harina
60 gramos (1/2 barra) mantequilla
1/4 cucharadita nuez moscada
Sal al gusto
Limpiar hígado de membranas. Poner en olla con agua caliente con 4 hojas laurel y sal. Tapar y hervir 15 minutos. Apartar y colar. Refrescar.
Preparar la salsa blanca, licuando leche, harina y nuez moscada. Verter a olla con mantequilla y sal. Revolver hasta hervir y espesar. Enfriar.
Procesar el hígado con mitad salsa blanca, brandy, jamón y tocineta.
Procesar resto salsa blanca con hígado procesado y resto condimentos. Rectificar sazón.
Se vierte a 1 o 2 moldes inglés o de terrine engrasado y enharinado con polvo de pan o moldes individuales. (1.1/2 taza)
Colocar en cazoleja con agua hirviente y hornear a 350 ° f. de 45 a 60 minutos.
Poner un trocito de mantequilla encima para evitar haga costra.
Hacer prueba con palillo para retirar del horno al salir limpio evitando se reseque.
Sacar. Barnizar con mantequilla derretida. Refrescar. Refrigerar hasta 2 semanas cubierto con papel autoadhesivo. Puede congelarse pero pierde textura.
Consumir 12 horas después de preparado para que se tomen los sabores.
Poner al fondo 1 hojita pequeña laurel (opcional).
2 unidades grandes 8-10 unidades individuales